Hace ya muchos años vi un documental en la tele que llamó mucho mi atención. Versaba sobre la obsolescencia programada. En él se relataba que la primera bombilla que se inventó se diseñó para que no dejara de alumbrar nunca; con el objetivo de que su filamento fuera imperturbable y durara para siempre.
Sin embargo, se dieron cuenta de que, una vez todas las familias disponían de todas las bombillas que necesitaban para alumbrar sus hogares, dejaron de adquirir este producto y la ventas bajaron. De manera que decidieron que en algo se habían equivocado porque habían disminuido sus beneficios. Decidieron que las cosas deberían tener un tiempo finito para que nos viéramos en la necesidad de adquirir de nuevo el producto y así mantener los beneficios y el consumo. Por eso las lavadoras se rompen antes, no se fabrican piezas de recambio, las pinzas son ahora de plástico en vez de madera,.. y un largo etcétera.
Pues bien, existe algo que ya tenía la obsolescencia programada antes que esa primera bombilla. Algo que desde el momento que se creó fue concebido con un principio y un final. Y ese algo es la vida. Está en su misma definición: nacemos, evolucionamos, nos adaptamos al medio, nos desarrollamos, nos reproducimos y morimos.
Nosotros nacimos con nuestros días contados y, cuánto menos tardemos cada uno de nosotros en meternos eso en “nuestras duras molleras”, antes empezaremos a brillar en nuestras propias vidas; como esas bombillas que iluminan las estancias sabiendo que un día dejarán de dar luz.
Muy bueno, te hace reflexionar 🤔 bastante.....A BRILLAR SE HA DICHO🥰👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼👍🏼
Muy chulo... te dan ganas de, si todavía no estás en ello, ponerte a hacer algo que sea relevante.... para tí o para el mundo en general....
Muy adecuado hoy. Es duro reconocerlo, pero es así