Recomendaciones en el mes de los libros

De nuevo rondan las fechas del día del libro y, en esta ocasión, quería recomendaros el último que he leído: El príncipe destronado, del inimitable Miguel Delibes.

Una novela sencilla, amable, corta y bonita. Entrañable fue la palabra con la que la definió la bibliotecaria a la que se la devolví. Entrañable. Muy cierto; opino que es la palabra justa. Personajes y contenido conmueven tu corazón. El protagonista es un niño de cuatro años y la historia narra sus peripecias durante un día con su familia. El relato es precioso, sin embargo, lo que más me ha fascinado es la forma en que está escrito.

Para comenzar os diré que el narrador es diferente a todo lo que había leído antes. Hay quien afirma que se trata del protagonista, pero yo no lo creo así por la sencilla razón de que observa situaciones que a un niño le pasarían inadvertidas aunque, de algún modo, Delibes consigue que en determinados momentos todos pensemos que es el pequeño quien las narra.

Otra cosa que me ha llamado la atención es que prácticamente toda la novela está construida a base de diálogos, sin apenas descripciones. Unos diálogos tan magníficos que te cortan la respiración o te sacan una sonrisa. O puede que todo al mismo tiempo. Diálogos que, por sí solos, describen a sus personajes —tan bien construidos que los echas de menos incluso antes de finalizar el libro—. Diálogos que explican lo que dicen y, sobre todo, lo que no dicen —tan importante en narrativa y que de ello, de lo que el autor no cuenta y el lector entiende, este libro está tan repleto—.

Hace muchos años vi la película dirigida por Mercero basada en él. Por aquel entonces yo era una niña que compartía mirada con Quico y disfrutaba de sus travesuras —La Guerra de papá. También os la recomiendo—. Ahora, sin embargo, ya de adulta, me he deleitado leyendo el libro con otros pasajes que en aquellos años no entendí, al igual que Quico.

Para finalizar compartiré con vosotros una curiosidad que explica el mismo autor en la edición del 2019 y es que la novela se originó por una apuesta entre compañeros escritores. ¿Qué os parece? ¡Bendita apuesta la que causó que semejante maravilla viese la luz aunque, increíblemente, lo hiciera después de permanecer muchos años en un cajón al considerarla un editor con calidad insuficiente! ¡Habrase visto!

¿Y vosotr@s? ¿Por quién apostáis? ¿Cuál es vuestr@ novelista o libro favorito? ¿Cuál os ha marcado más y por qué? ¿Me haríais una recomendación?

Un abrazo y mil gracias de antemano por vuestras participación en mi humilde blog.